En la Gran Via de les Corts Catalanes, se percibe desde lejos su vibrante neón naranja: Baby Jalebi, restaurante de street food pakistaní-indio que combina autenticidad, alegría y sabores intensos en un espacio moderno. Aquí, la experiencia no se queda solo en comer: es dejarse llevar por aromas especiados, descubrir platos coloridos y disfrutar de una cocina de raíces en un ambiente fresco y cercano.
Fundado por los hermanos Mani y Majid Alam junto con Bilal Khan, Baby Jalebi nace con la misión de traer recetas de la infancia en el Punjab a Barcelona, pero hechas a su manera: sencilla, acogedora, con identidad. Todo el menú está pensando para compartir, para sorprender, y para que lo cotidiano sea especial.
El corazón de Baby Jalebi está en platos como el pollo tikka masala espectacular, el cremoso palak paneer, gol gappe que estallan de sabor, samosas crujientes, el shawarma reinventado, y variedades de curry que van del más suave al bien picante si lo deseas. Acompañan bien los naans hechos al tandoor, los arroces fragantes y los postres tradicionales como el jalebi crujiente o el gulab jamun.
Y porque cada gran comida se disfruta mejor con buen ambiente, el local destaca por su decoración audaz: tonos naranjas, detalles modernos pero acogedores, mesas para compartir y una vibra que mezcla lo callejero con lo auténtico. Buen servicio, música que acompaña sin saturar, y una atmósfera que invita a quedarse tanto para una cena como para un almuerzo relajado.
Por qué ir
Baby Jalebi es un imprescindible si quieres explorar lo mejor de la cocina pakistaní/india en Barcelona más allá de lo típico. La cocina es auténtica, los sabores poderosos pero bien equilibrados, y el menú ofrece opciones para todos los gustos, incluyendo veganos y vegetarianos. Perfecto para salir con amigos, para quienes aman el picante, o para quienes disfrutan de una cena llena de sabor, sorpresas y buen rollo en Sant Antoni



